La fundación de La Perla

La Yeguda la Perla existe ya desde el año 1999. El fundador Alberto Herranz Aparicio, cuyo corazón late por los caballos y especialmente por los lusitanos, comenzó por buscar las mejores yeguas y sementales de Portugal para establecer su cría. Para ello, no sólo daba importancia a la belleza exterior y al mejor pedigrí, sino también a la variedad de colores. Entre otras muchas características destacadas, esto es lo que hace que nuestra raza sea tan especial hasta el día de hoy. A Alberto le gustaban especialmente los caballos palominos o también llamados perlas. De ahí viene el nombre de la yeguada.

Alberto estaba impresionado por la calidad de los Lusitanos, su rendimiento, la increíble agilidad así como su habilidad. También destacaron por su versatilidad y valentía. Al mismo tiempo, mostraron su carácter amistoso y amable. En resumen, encontró en esta raza las cualidades que le parecían indispensables para su futura cría: personalidad noble, alta calidad, facilidad de monta, movimientos excepcionales y, como broche de oro, ¡los magníficos colores!

A día de hoy, Alberto Herranz Aparicio está muy orgulloso de que la yeguada La Perla sea uno de las mejores yeguadas de lusitanos. Así lo demuestran los numerosos éxitos y medallas que ha conseguido con sus caballos en campeonatos y concursos.

Demostró especialmente su talento de encontrar caballos de calidad cuando seleccionó en Portugal al joven Alcaide, que entonces no tenía ni un año, y lo trajo a España. Alcaide creció en La Perla y recibió allí su formación básica. Más tarde se cambió a un jinete en Madrid y ya a los 6 años se convirtió en Campeón de España de su grupo de edad. Su carrera deportiva le ha convertido en el lusitano más exitoso y ha llegado a competir en los Campeonatos del Mundo y en las Olimpiadas con el equipo español de doma.